Preparados, listos... ¡¡YA!!

Hoy ha sido un día muy especial, especial porque nos hemos estrenado en uno de los acontecimientos más tradicionales de nuestro colegio: la carrera del pollo. ¡Y han venido a vernos nuestras familias!

Hemos estado preparándonos durante unos días para hacerlo genial, disfrutar y hacer disfrutar a la gente que ha venido a vernos, porque lo más emocionante de esta carrera es que todos somos ganadores por el simple hecho de participar, disfrutar y sonreír... y los niños de dos años nos hemos superado con creces.

¡Enhorabuena a todos, sois unos campeones!

¡¡Feliz día, papá!!

Porque me enseñaste a ser como soy,

con un beso fuerte, las gracias te doy.

Seré como tú cuando sea mayor,

y estarás para siempre en mi corazón.

Orquídea Marinozzi

¡Ha llegado el día! Llevamos unos días poniendo todo nuestro empeño y nuestra mejor sonrisa en elaborar un regalo para una de las personas más importantes para nosotros: nuestro papá. Son nuestros súper héroes y siempre nos quieren por encima de todo, así que se lo han ganado con creces.

Nos hemos puesto manos a la obra y hemos hecho un precioso marco con una imagen muy especial. ¡No os lo perdáis!

Materiales para mejorar nuestra habilidad motriz fina

En el aula de dos años, con materiales tan sencillos como palos, macarrones, pinzas de colores o pajitas, realizamos diversos juegos que nos ayudan a mejorar nuestra motricidad fina, a aumentar nuestro control óculo-manual, al desarrollo de nociones espaciales y al entrenamiento de la atención. 

Y todo sin darnos cuenta, siempre a través del juego.

JORNADA DE PUERTAS ABIERTAS

¡Sorpresa!

A los niños y niñas del aula de dos años nos encantan las sorpresas, así que esta vez nos han sorprendido con... ¡¡¡una mesa pizarra!!!

Esta mesa nos puede ayudar a desarrollar nuestra imaginación y a aprender a compartir espacios y materiales. ¡Mirad, mirad!

DULCE - SALADO

A los niños nos encanta ser los principales protagonistas de todas las actividades y como más aprendemos es a través de la manipulación y la vivencia de experiencias. Por ello, hemos trabajado los alimentos dulces y salados con un taller que nos ha parecido muy divertido.

Tras sentarnos todos juntos, nuestra señorita ha colocado encima de la mesa un papel con sal y otro con azúcar. A primera vista, ¡eran iguales! Hemos visto que los dos eran puntitos muy pequeños, de la misma textura y de color blanco... así que no nos ha quedado más remedio que probarlo. Y... ¡sorpresa! ¡uno era dulce y otro salado!

Después, nos han colocado encima de la mesa diversos alimentos dulces y salados: rosquillas, bollos de leche, jamón, queso, galletas... y tratando de respetar el turno, los hemos ido probando y descubriendo si eran dulces o salados.

¡Ha sido una experiencia deliciosa!

Mamá, papá... ¿os ayudo?

Nos estamos haciendo cada día más mayores y responsables, así que estos días estamos aprendiendo a poner y quitar la mesa, para así ayudar a nuestros papás, mamas, abuelos... Aprender a ser cada día más autónomos también puede adquirirse a través del juego. 

¡Menudas merendolas montamos en un momento!